Ambos colores pueden ser el toque de elegancia para brillar a donde quiera que vayas.
¿Quién dijo que los brillos sólo se usaban por la noche? Este invierno queremos romper con los esquemas y usar los colores metálicos en nuestro día a día, ¡podemos estar glamurosas siempre! Pero, eso sí, no hay que abusar. ¡Tenemos que combinarlos con moderación! Colores sólidos y neutros como negro o gris, para no restarle protagonismo y que luzca mucho mejor. Un look sobrio y elegante al mismo tiempo, cargado de estilo.
Estaremos perfectas con “una camisa de Dorothy Perkins, unos jeggings y combinando con una buena bota biker. Atrévete a llevarlo en bolsos, cinturones e incluso bailarinas y juega con los opuestos. Por ejemplo, el shopping bag de Zara, o las bailarinas de paillettes también de Zara harán de look diario un estilo más lady.
Para las noches podemos darle un toque más glamuroso con el vestido de escote halter de Mango, ideal para un coctel (tengo que confesar que su espalda abierta me enamora) combinado con una chaqueta Kimono de Blanco. O incluso el modelo que os mostramos de Topshop, para las más atrevidas al más puro estilo bailarina.
Y no solo las prendas de vestir brillarán con luz propia este otoño, también las manos. Son muchas las famosas que ya están apostando por manicuras metalizadas: destellos de oro, bronce, cobre o plata y azules profundos casi negros.
¿Que os parece? ¿Os unís al contraste más “in”?
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